divendres, 11 de desembre del 2009

LE CORTAN LAS MANOS PORQUE SE COMÍA LAS UÑAS.

Así de radicales han sido unos padres en Guisterrnolles con su hijo de diez años al no encontrar una salida para el problema de comerse las uñas. Primero intentaron untar las uñas con líquidos asquerosos, pero fue inútil, tan inútil como las sesiones de hipnosis, donde descubrieron que su hijo había matado al perro del vecino, pero no lograron la solución al problema principal.

Y.T, el protagonista de la historia, está triste, cosa que no entienden los padres “lo hicimos por su bien”, comenta la madre. “¡Ahora jugaré a la wii con la polla!”, dice entre sollozos el joven amputado con mirada triste y una lágrima resbalando por su mejilla.

“Era horroroso, lo hemos probado todo. Incluso una vez lo encontramos mascando chicle, cosa que es buena, pues así no se las muerde. Le felicitamos por ello, pero él se rió como un demente, dijo que no era un chicle, sino la uña del pulgar”, dice D.R, el padre.
“La operación ha sido un éxito”, nos decía el cirujano W.W. “Quizás la operación nos ha abierto los ojos para luchar, por ejemplo, con los niños que tienen la costumbre de comerse los mocos”. “¿Se les cortaría las manos también?”, osamos preguntar. “No. Las manos no. La nariz”.

Puede parecer “gore”, pero lo cierto que con estas operaciones, los niños y niñas del mundo, no volverán a comerse la uñas y esto es un logro para la medicina. Según la (A.M.M.C), Asociación de Masturbadores Masculinos Compulsivos, ponen el grito en el cielo, pues rechazan completamente las intervenciones quirúrgicas. “¡¡No queremos perder nuestros miembros!!”. ¿A que miembros se refieren?... ¿manos? o ¿penes?.